Uno de los factores más importantes que influyen en nuestro bienestar general es nuestra higiene personal.
Es por eso que nos duchamos con regularidad y tratamos de mantener nuestro cuerpo limpio y libre de gérmenes. Usted se sorprenderá al descubrir que no importa cuánto nos duchamos hay una parte del cuerpo nunca puede estar limpia.
Incluso puede contener 67 tipos diferentes de bacterias todos los días y es nuestra parte más sucia del cuerpo. ¿Puedes adivinar cuál es?
Como ya hemos mencionado que todos tomamos una ducha con regularidad y tratamos de eliminar todas las bacterias y microorganismos que nos encontramos y llevamos a todas partes en nuestra ropa, la piel y el cabello.
Sabemos que pueden poner en peligro nuestra salud para hacer todo lo posible para deshacerse de ellos. Pero incluso si acabamos con la ducha y lavamos el cabello, el ombligo es probable que este todavía sucio y lleno de todo tipo de gérmenes y bacterias.
Esto se debe a que está escondido en la posición y permite que se convierta en un caldo de cultivo para las bacterias, el sudor, el cabello, las células muertas y la suciedad. Esto sólo significa que si usted no sabe cómo limpiar su ombligo que va a crear las condiciones perfectas para las bacterias crecimientos, terribles olores e incluso infecciones.
Según los estudios, el ombligo contiene hasta 67 diferentes bacterias en sus pliegues, incluso si acaba de ser duchado. La ducha no es suficiente, si quieres mantenerla limpio es necesario utilizar bastoncillos de algodón.
Así que, ¿cuál es la forma correcta de limpiar el ombligo?
Esto es lo que necesita saber para mantener esta parte del cuerpo limpia y libre de gérmenes:
Pliegues del ombligo interior
Antes de tomar una ducha tomar un Q-tip, sumergirlo en alcohol y limpiar a fondo los pliegues. Después de tomar una ducha y mientras estás duchando inmersión en el Q-tip en un gel de ducha y limpiar el ombligo de nuevo.
A continuación, se puede enjuagar con agua tibia y seque con una toalla limpia.
Botón exterior del vientre
Tome una toalla de algodón limpia y verter un poco de gel de ducha en él. Limpiar el ombligo con la toalla, enjuagarlo con agua tibia y seque con una toalla.
Fuente: Estar en salud
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